Que no le pidan cuentas a Eriksson

Bien dijo Miguel Herrera que la falta de tiempo no es excusa para pedirle resultados a la seleccción mexicana. En su mayoría, los jugadores llevan varios años jugando juntos. Claro, el sistema varía, pero ¿cuantas veces no habrán cambiado de sistemas sus clubes para cubrir la ausencia de algún jugador o para derrotar a algún rival con un parado distinto?

Si a alguien hay que echarle la culpa (por lo menos desde mi punto de vista) es al mismo futbol mexicano. Ayer, Efraín Flores fue claro. La falta de una buena delantera es resultado de que 17 clubes dan preferencia a extranjeros en vez de paciencia en el proceso de jóvenes mexicanos. Y si no, simplemente vean cuántos extranjeros lideran la tabla de goleo. Efraín explicó más del tema... "si un extranjero no mete gol en dos o tres partidos lo dejan el resto del torneo, al mexicano lo sientan luego luego... (sobre si los federativos conocen el problema) claro que lo conocen! pero ustedes saben por qué lo hacen, hay intereses... entonces que no le pidan cuentas al técnico de la selección..."

Y por eso creo que tiene razón. No hay paciencia para el proceso de los jóvenes mexicanos (sobre todo los delanteros, me queda claro que en defensa ahí la llevamos). No es que Giovani y Vela no sean buenos, pero ni un campeonato del mundo ni el hecho de que estén en Europa (donde todavía no se ganan la titularidad) les va a dar la experiencia necesaria para disputar partidos con selección, por lo menos no de titulares y mucho menos cuando está en riesgo una clasificación al mundial. Es necesario un proceso. Aclaro, no son malos, pero hay que darle tiempo al tiempo. Dice Eriksson que cómo más van a adquirir experiencia más que jugando, pues sí, pero no cuando pones en riesgo un pase mundialista. Hay partidos de preparación y hay partidos de eliminación.

Vuoso calló cualquier queja (si es que todavía existían) sobre convocar a un naturalizado. Sinha lo mostró anteriormente en innumerables ocasiones, Franco también. Así que no me caería en sorpresa que Leandro, Sinha, Vuoso y hasta Nery (que a algunos se les olvida también tiene otra nacionalidad) sean las soluciones para la selección. No por naturalizados, por experiencia, esa misma de la que carecen los jóvenes mexicanos por intereses económicos de clubes y federativos.

Las matemáticas favorecen a México, tenemos el pase a la Hexagonal final, y aunque le damos preferencia a una victoria sobre un futbol espectacular (seamos honestos), exigimos ambos porque estamos concientes de la capacidad de nuestros futbolistas. Que suden la playera, que la peleen y que se hagan sentir en la cancha cualquiera que esta sea.